Minuto
CHAVA PORTILLO

Está por arrancar la rueda de la fortuna política en algunos estados y hoy más que nunca habrá cambios en la lotería arrojando caras tristes de la decepción y otras sonrisas de los que les llegó el premio de Briján como generoso dios del juego, muchas ocasiones sin haber comprado boleto.
La mesa está puesta y si bien es cierto que las cartas de hace unos años no son las mismas, siguen repitiendo los mismos alegatos solo que con diferente nombre, por ejemplo, el PRI y PAN que solían hacer y deshacer, partiendo y repartiendo el costal de la fortuna hoy a duras penas conservan el registro para no salir de la contienda. ¿Quién lo iba a imaginar?
Los partidos “pacotilla” y las lapas eternas seguirán pegadas a la retesa ubre de los que ganan, el PVEM o el PT no batallan ni se enfrentan, su vela modifica el rumbo para donde la lleve la marea, no hay puerto aborrecido ni muelle rechazado, atracan donde se les haga noche y sueltan amarras cuando sea necesario.
Lo que ha cambiado es el estilo. Antes había mucho maquillaje y un poco de rubor, los partidos “grandotes” fingían no saber y enseñaban otra cara, escondían el delito, barrían debajo de la alfombra ocultando las patrañas. Hoy el cinismo es lo que reina y mientras más burdos, el tejido antes fino, hoy es lucidor.
La aplanadora de morena sale a relucir y el cínico secretario de gobernación no tiene empacho en presumir que llega en el avión militar de la corrupta SEDENA y hacen lo mismo que hacía el tricolor por décadas, sólo que ahora se ufana y se publica, con la diferencia que en la mañanera el cómplice real justifica la visita al estado que tendrá elecciones como una obligación del político considerado el hermano que nunca tuve.
También es frecuente la presencia de Claudia niña de mis ojos en lugares tan apartados de su trono y sin alguna razón sube al templete y habla sin disimulo vitoreando al candidato de morena en espera de que le griten ¡presidenta! Y es tan sucia que manda a los reventadores a los actos de Marcel Ebrard para provocar su molestia y coraje porque todos sabemos que son las instrucciones del cocodrilo, así es que nos hagamos locos y aguantemos, pero esa es la melopea de la sonata terrible.
¿Cuál es el problema? La ausencia de líderes, la falta de disciplina y de moral, de respeto y principios. Hoy los chamacos quieren enseñar al obispo a recitar el padre nuestro o dicho de otra manera como el caso de Samuelito gobernadorcito, quiere enseñar a su padre a hacer hijos, y que ya no encuentra con quien reñir, porque piensa que está en la prepa, después de pelear con el refinadito fiscal Gustavo Adolfo Guerrero que aun esta despachando, después con las feministas, luego con los maestros, ahora con los legisladores y ayer con los ex gobernadores quien Fernando Canales lo dibujó a la perfección: es un amlito y le recomendó que deje la arrogancia y altanería y se ponga con seriedad a trabajar, y se lo está diciendo un empresario de grandes ligas que llegó a gobernador cuando este chamaco dejaba el biberón.Ya no existen los Corella, Aguirre Villafaña, Jorge Padilla, Polo
Espinosa, Juventino, Martínez Domínguez, mucho menos Jorge Treviño y si viven, no les interesa el lodazal en que se revuelcan los políticos nuevos que cambian de partido como cambiar de corbata anaranjada o más fácil, por un plato de frijoles y la inmunidad de que no los toquen cuando dejen el encargo.
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