Minuto
CHAVA PORTILLO
Todos los gobiernos en todas la etapas y en cualquier lugar del mundo siempre existe un genio tenebroso como Fouché que a la vista y entendimiento de todos en ocasiones causan más deterioro que asistencia. De manera local muy económica en pasados gobiernos del estado difícil no traer a la memoria a Paco Cienfuegos con el juvenil Rodrigo Medina que además del gran estorbo que significó Humberto el Golden dady Medina Ainsle, el poca braza gozaba de una impunidad y poder que nada se movía en el aparato burocrático si Paco no autorizaba.
Con el bronco siempre se habló del poder que ejercía Enrique Torres Elizondo y el gran parásito que es su carnal Mauricio que por más que sufrieron para “pavimentarle” el camino con puestos importantes, no se dejaba ayudar por su gran problema mental porque su QI era demasiado pequeño, como el caso de Zeferino Salgado que ha hecho de Pedrito su hermano incómodo todo, desde alcalde, delegado de PROFECO hasta la legislación federal actual. Otra “eminencia gris” fue Manuel Vital que arribó al equipo de Jaime Rodríguez en la miseria y hoy cuenta con chequeras retesas de parné.
En el gabinete del nuevo Nuevo León existen un par de funcionarios que gozan de cabal salud y poder plenipotenciario, uno es el recién llegado Félix Arratia que ser un sujeto inocuo lo encumbraron como secretario del medio ambiente y es el que tuvo la ocurrencia de desmontar la vegetación del rio santa Catarina sin razón alguna causando más polvo que el que existía con la única explicación es que llegando un huracán causaría desbordamientos y tragedia. El otro es Hernán Villarreal que es el dueño de la parcela de la movilidad, la construcción y todo lo que tenga que ver con el desarrollo.
HV estaba inscrito en la primera lista de candidatos para ocupar la secretaría general de gobierno, pero sus arranques con temperamento volcánico y arrogancia supina sumado a la recomendación del padre de Samuelito el de nosotros hicieron que cambiara la ruta de las naves y entregara la difícil encomienda a Javier Navarro que ha servido para dos cosas, una es nada, la otra…también, dejando a Villarreal con la poderosa cartera de la construcción y desarrollo.
Entre otras pifias y desconciertos no ha podido dar al gobernador la satisfacción de solucionar el problema del transporte porque de los 1200 camiones chinos que compraron han llegado acaso veinte y por consecuencia, miles de recordatorios maternales al ejecutivo cuando la culpa es de Hernán.
Pero dice el adagio popular, no tiene la culpa el indio, sino el que lo hace compadre y si Villarreal tiene causa, el efecto es del gobernador, no por haberlo nombrado, más bien el que no haya podido despedirlo, que caray.
Los grandes proyectos como el metro en sus líneas 4, 5 6 e infinito, la tardada carretera inter-serrana, la continuación de La Gloria-Colombia, los libramientos que no son utilizados por lo caro de su uso y la pésima planeación, los camiones con sus tarifas y tardanza recaen solamente en la responsabilidad de Hernán el Fouché de la corte, aunque le falte mucho para igualarlo con tan perversa brillantez, pero lo intenta.
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