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CHAVA PORTILLO
Quién iba a pensar que una hormiga se comería a un cocodrilo. Un día por accidente apareció una mujer que lo único que podía presumir era su florido lenguaje aderezado de palabras que la moralina hipócrita y santa sociedad pía prohíben, tanto que, hasta los medios impresos, actualmente, suplen con puntos suspensivos y los electrónicos disfrazan con un pitidito.
Una señora folclórica, raza, ingeniera, simpática y los que presumen su cercanía aseguran que es buena conversadora, cuenta chistes de color subido, pero entretenida en pláticas de sobre mesa, buena para la cocina y de excelente memoria, incluyendo el tequila helado y la barbacoa de carnero, obvio comiendo en donde se prepara la mejor del mundo.
Llega Vicente Fox y la “descubre” incluyéndola en el gabinete por ser luchadora en Acción Nacional, activa simpática y tener una buena comunicación con los grupos indígenas por haber nacido en el poblado de Tepatepec Hidalgo tierra de grandes artesanos y charros profesionales. Fuera de eso, nada relevante.
Como senadora se enfrenta con el presidente López que le responde con una agresiva diatriba y al solicitarle derecho de réplica y negarle ser recibida en palacio nacional, empieza ahí la aventura de la mujer que pocos hacían en el mundo y que está siendo una roca en el zapato del inefable personaje, cuando nadie podía haber imaginado que una ciudadana común lo pondría de cabeza.
En un inicio López no le dio importancia y hasta se atrevió de mofarse de Xóchitl porque en algún tiempo vendió tamales…y como dice la canción, ese fue su error, ese fue su error, porque engendró de una ciudadana del montón, que ahora habla recio y pisa fuerte, trepándose a las preferencias aún sobre Claudia niña de mis ojos, porque Juan pueblo está viendo una opción en la capacidad de XG o que se repita la cíclica historia de Vicente Fox, donde la gente NO voto por el ranchero, votó en contra del repudiado PRI.
Cada día que pasa el tlatoani de Macuspana está más cerca de irse a su rancho y la ilusión de ver prolongado su mandato en cualquiera de sus corcholatas se le escurre entra los dedos de la mano como un chorro de agua por la influencia de Xóchitl Gálvez que de ser una metáfora se esta convirtiendo en cruda realidad.
Al rey de palacio nacional de la preocupación, se transformó en miedo y ahorita se puede afirmar que ya es terror, porque si existiera alguien con intenciones de cobrarle la factura a López al dejar la presidencia es la señora de Hidalgo que esta sorprendiendo a propios y extraños.
En resumen, el vertiginoso ascenso de Gálvez se da por: el hartazgo e impotencia de la gente que siente por López, ser la única persona que despertó del aletargamiento del pueblo bueno y sabio, además de, siendo crudos, cínicos y venenosamente sinceros, no hay más y cualquier cosa es mejor que la que tenemos. Así es que, en la reunión de los ratones, ya brincó una que fue capaz de ponerle el cascabel al gato, de lo cual, al menos este escribidor, se siente feliz y con esperanza. minutochavaportillo@gmail.com
