Minuto
CHAVA PORTILLO
La desagradable situación “olida” más que vivida en días pasados en el área metropolitana de Monterrey no es primicia, tampoco fortuita. ¿O ya se nos olvidó cuando pasábamos por celulosa y derivados en Ruiz Cortínes? ¿O circular por la calzada Madero pasando por Cigarrera La Moderna? ¿O años anteriores cerca de Fundidiora? El martirio de vivir cerca de los rastros de equinos que sentaron sus reales entre El Carmen, Hidalgo y Mina N.L. con el insoportable hedor despedido de las “hueseras” que procesan uno de los principales componentes deshidratados del alimento para perros?
Los fétidos aromas que expelen las fabricas al procesar cualquier producto son vomitivos y molestos y la influencia, el poder político o económico de industrias como PEMEX en Cadereyta enferman pulmones, ojos, nariz y garganta además de contaminar el aire y los cuaces de los ríos, pudriendo parcelas, sembradíos y tierras de cultivo.
La defensa de las buenas causas y la promesa de los charlatanes en campaña como Samuelito el doctor de nosotros que embaucó al otro chamaco con apellido de gente famosa que cerrarían la refinería para siempre, fueron echados en carrera por los badulaques del sindicato charro petrolero y nunca más volvieron a Cadereyta ni por el cambio.
Deseamos el progreso, la vanguardia y el beneficio de una urbe gigantesca, pero añoramos la tranquilidad y lo apasible del pueblo cuando sacábamos las mecedoras a la banqueta para platicar y ver pasar las vacas de la ordeña con el fresco de la noche, dormir con la puerta abierta acostados en el suelo sin riesgo ni temor.
No soportamos el ruido, ni la contaminación, pero exigimos la calle pavimentada, el farol de antaño convertido en luz mercurial y el personaje que llamábamos “sereno” se transforme en policía de academia en lujosa camioneta nueva con torreta y radio comunicación de vanguardia, como la Proxpol que le inventaron a Clara Luz Flores en Escobedo y que sigue igual de ineficiente ahora en las manos del alcalde aprendiz Andrés Mijes.
La modernidad acarreó muchas cosas buenas con la automatización, pero trajo también mucha basura como es la que estamos padeciendo con los avatares del progreso en contaminación en todas sus facetas como la visual con anuncios espectaculares que son una inmoralidad, pero que los dueños en estos giros gozan de libertinaje porque cuando lleguen las campañas serán los más solicitados y como dice el vejete: amor, con amor se paga.
Pero las cosas están mal desde que nacieron y si no, ahí tiene usted a la burla del nombramiento de Félix Arratia amigo del gobernador que sabe de contaminación lo que este reportero sabe de astronomía, suple a un experto Alfonso Martínez que dejó el cargo porque no tenía la preferencia del bisoño gobernante, además que las empresas poderosas pesan mucho más que las leyes todas juntas sin olvidar que poderoso caballero, es don dinero.
Ese despertar con olores nauseabundos es un incio de lo que nos espera, porque reitero, por un lado queremos muchas TESLAS en el estado, pero no deseamos contaminación, tráfico pesado y atorones. Nos quejamos de la CDMX con sus marchas, plantones y súper contaminación, pero vamos para allá…que volamos. MENUDENCIAS: la carga de los aviones que llegan al AIFA se trasladan al Benito Juárez por tierra tardando dos días más. Ninguna novedad, ¡cambio y fuera! minutochavaportillo@gmail.com