Minuto

La improvisación, la gran tragedia

By diciembre 7, 2021No Comments

Minuto

CHAVA PORTILLO

curson.mx

De las múltiples tonterías que ha expresado el cocodrilo mayor presidente de México en su diarrea discursiva ha sido que para conformar un equipo de trabajo prefiere un noventa por ciento de lealtad y el resto diez por ciento de capacidad.  Nada más estúpido, escoger la amistad por el conocimiento, experiencia o talento.

Eso explica lo grisáceo de su gabinete donde sobre salen los tibios, los tontos pero sin duda abyectos que se mueren en la raya como el caso de Hugo López Gatell, el inservible de su jefe Jorge Alcocer que hace las veces de florero decorativo, el costal de mañas que se le cae el sistema Manuel Bartlett o la ingenua Luisa María Alcalde que entiende de su responsabilidad lo que este reportero de astronomía.

Un ejemplo sin duda es el General Secretario Luis Crescencio Sandoval que lo único que lo disculpa es la lealtad que caracteriza a los hombres de verde olivo, pero les ha retribuido a manos llenas aunque no lo hayan solicitado.

Otro patrón de conducta fue el gabinete que configuró Jaime Heliodoro que era de asustarse partiendo del Procurador de Justicia Roberto Flores que era una caricatura emanada de una tira cómica de Marvel, el dipsómano Enrique Torres y la brutalidad hecha persona en los zapatos de Mauricio el hermano tonto que escaló a las más altas jerarquías y se retacó los bolsillos de parné.

Para acabar pronto, solo Manuel González Flores como secretario general de gobierno y si acaso Genaro Alanís sacaban la pelota del cuadro, de los demás bobos con iniciativa como Manuel de la O y la señora Errizurriz en educación, no rebuznaban porque no sabían la tonada.

La gran diferencia de los equipos de trabajo de Natividad González Parás y hasta Rodrigo Medina significó un mundo de diferencia.

Los recién estrenados políticos de la nueva ola que referíamos en este espacio aún es temprano para soltar el gato a retozar, porque tanto Samuel como Luis Donaldo están todavía parchando agujeros en llantas y pivotes como el caso de Colosio que el sábado pasado tuvo su bautizo de fuego cuando un pesado camión de la empresa Viba que maneja productos cárnicos se volcó en la carretera nacional temprano por la mañana y a las siete de la noche no podían solucionar el accidente quedando cerrada la ruta por más de doce horas haciendo un vía crucis de Santiago a Monterrey en cuatro horas.

La explicación es que le confirieron la responsabilidad a un amigo de Colosio que sabe de cualquier cosa menos de ingeniería vial lo que los maleantes entienden de decencia de moral.  No tuvo la capacidad el bisoño funcionario de ordenar tres grúas titán para retirar en minutos la carga siniestrada.

Los permisos indebidos de alcoholes que otorgó el alcalde Adriancito el pequeño no ha podido cancelarlos Luis Donaldo porque están en la mesa de un juzgado y esperamos y deseamos que lo haga con prontitud.

Samuel es la misma medicina.      Arrancó y aún no sabemos si está esperando el trabajo de gente capaz con vocación y perfil o basará su mística en lo que lo ha caracterizado hasta ahorita, buenas ilusiones y muy buenas intenciones, supliendo gente con perfil por jóvenes que tiene sueños de grandeza.                                      

minutochacvaportillo@gmail.com