PAN Y CIRCO – Opinión Editorial
Solicitud de licencia
La solicitud de licencia “con carácter de urgente” que presentó el Gobernador Samuel García al Congreso de Nuevo León, el pasado lunes 23 de octubre, se convirtió en el tema político del momento.
Si bien es algo que ya se esperaba, el caso muestra una serie de peculiaridades.
Primero, por la confrontación que se ha dado durante un año y medio entre los Poderes Ejecutivo y Legislativo, específicamente, entre el Gobernador y los liderazgos del PRI y del PAN.
Samuel García tiene al Congreso en contra, pero le van a terminar aprobando su solicitud de licencia. Porque de no ser así, el Gobernador puede de nuevo acudir al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación a promover un juicio para la protección de sus derechos político-electorales.
Ahora bien, el Congreso es quien tiene la facultad para nombrar a un gobernador interino. Samuel “informa” en su solicitud de licencia que el Secretario General de Gobierno quedaría como “encargado del despacho”.
Eso aplica si y sólo si la ausencia del gobernador es por menos de 30 días… y en este caso, sería por seis meses.
¿Entonces?
Pues tendrán que negociar quién se queda.
Quizá sea el momento para retomar el diálogo.
En la solicitud de licencia se habla de continuidad… de gobernanza.
¿Podremos aspirar a ello?
Una segunda peculiaridad es lo que está ocurriendo hacia el interior de Movimiento Ciudadano.
La solicitud de licencia de Samuel García fue presentada minutos antes de que Dante Delgado rindiera su informe legislativo.
El dirigente nacional del partido naranja no tuvo más remedio que admitir que en unos días iniciarán su proceso de selección de candidato, teniendo a Samuel García como opción interna y a Marcelo Ebrard como una opción ciudadana externa.
Esa misma noche, la del lunes 23, Samuel García escribió en sus redes sociales que estaba analizando seriamente la posibilidad de competir en la elección presidencial, para lo cual necesitaría cumplir con requisitos legales y que en su momento tomaría la mejor decisión.
O sea que todo puede suceder.
El reclamo de algunos organismos empresariales no se hizo esperar. Señalan que la prioridad del Gobernador debe ser cumplir su compromiso con el Estado. Mencionan que “Nuevo León se encuentra en un momento clave de su historia, con grandes oportunidades y desafíos para su futuro”.
Por más que satanicemos el “chapulineo”, esto de brincar de un cargo de elección popular a otro, sin terminar el periodo correspondiente, es una práctica cada vez más común.
Lo están haciendo las candidatas presidenciales. Claudia Sheinbaum dejó de ser Jefa de Gobierno de la Ciudad de México. Xóchitl Gálvez en breve dejará de ser senadora.
Si Samuel García se va a competir “por la silla grande”, en Nuevo León tendrá que hacer un doble esfuerzo para convencer, pero aún más importante, para no echar por tierra el trabajo de sus dos primeros años en el estado.
Al final del día los ciudadanos requerimos seguridad, movilidad, agua, aire limpio… y que las inversiones anunciadas se concreten.
Y bueno, ya entrados en gastos, convendría ir pensando en “empatar” la elección de gobernador con la presidencial, para evitarnos tantas complicaciones.